El cangrejo ermitaño que cambiaba de casa con engaño.
Erase una vez un cangrejo rojo que vivía en una playa de Cádiz. Un día tenia que cambiarse de casa por que ya la suya ya le estaba muy pequeña y salió a ver si encontraba algún lugar para que pueda cambiarse de lugar de casa y entonces se encontró a una tortuga marina y estuvieron hablando:
y el cangrejo le dijo que si sabia si había algún lugar para si se podía irse allí a vivir y la tortuga le dijo que fuera mañana al mismo lugar y a la misma hora. El cangrejo le dijo que no sabía como poder agradecérselo y la tortuga loe dijo que él se lo agradecía a todo el mundo por lo amable que era. El cangrejo se fue para su casa muy satisfecho y empezó a recoger toda sus cosas. Al día siguiente por la noche se reunieron allí la tortuga y el cangrejo y la tortuga le enseño la casa al cangrejo estuvo muy ilusionado lo que pasaba que no era tan grande. A la semana siguiente salio por la noche y se encontró con una caracola y le pregunto si sabia un lugar donde pueda vivir el y le dijo que si y el cangrejo fue a su casa a por sus cosas y se fue a su casa nueva y estuvo allí unos cuántos de día y se fue a caminar por la noche y se encontró a una gaviota le dijo que el sabia una casa enorme y entonces se fue a aquel lugar que era grandisimo y aquel fue su lugar para siempre y un día llamaron a la caracola y el salio y una almeja que estaba buscando un lugar donde es pequeño y adaptado para ella. Le enseño el lugar y le pareció muy bonito y se quedo allí a vivir y todo el mundo estaba contento y el también y el estaba a todas hora cambiándose de casa. Y también pasaba una oruga que quería un lugar donde pudiera estar su mayor tiempo posible en su lugar porque el no se puede mover mucho y cada vez que alguna persona necesitaba alguna casa se lo preguntaba a el porque como el se iba de un lugar a otro no sabia nunca donde se va a quedar en un lugar fijo.
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